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viernes, 16 de diciembre de 2016

Star Wars: Rogue One. Reencuentro con la saga



Quién nos iba a decir a los fans de Star Wars que tendríamos una nueva entrega de nuestra saga favorita cada año, que se están preparando Spin-Off  de personajes clásicos después de dar por cerrada la saga galáctica con La Venganza de Los Sith, como Han Solo o Lando.

Después de la enorme expectación que levantó el Episodio VII: El Despertar de la Fuerza, película criticada y amada a la vez, esta nueva entrega nos llega para rellenar vacíos en la historia que todos conocemos. La que nos explica cómo se robaron los planos de la Estrella de la Muerte. Llega a nuestras carteleras uno de los estrenos más esperados del año: Star Wars: Rogue One.



Si bien es una película que se desmarca bastante de sus predecesoras y basta darse cuenta desde el inicio de la misma donde las letras amarillas con el fondo de estrellas no aparecen por ningún lado con la música ya convertida en himno del conocido John Williams. No os equivoquéis, esa primera impresión que tuvimos pensando "esto no es lo de siempre", se pierde totalmente una vez nos sumergimos completamente en la trama. Los fans queríamos algo diferente, algo más oscuro , alejado de la larga sombra del gigante Disney. Y creemos que lo han conseguido.

Rogue One está cronológicamente alojada entre el Episodio III y IV, y engancha con el IV de una manera fantástica con diferentes guiños a tramas y personajes de sobra conocidos por los fans de este universo.


En nuestra opinión a la película le cuesta arrancar pero una vez finalizan las presentaciones de los personajes y coge ritmo, se hace muy entretenida hasta las letras de crédito finales. Sobre todo los últimos 45 minutos una absoluta delicia visual que hacen que valga la pena su visionado en pantalla grande.

Gareth Edwards (Godzilla (2014), Monsters (2010)) no lo tenía nada fácil. Primero porque tenía que suplir a J.J. Abrahms y segundo porque crear una película que tuviera que enlazar todo ese universo sin caer en los tópicos, contentar a la gran masa social seguidora de la saga y convencer a los escépticos no está al alcance de todo el mundo.

Sobre el reparto, Felicity Jones, aguanta bien el peso de la historia, con una interpretación más que correcta de la heroína de la cinta, si bien es cierto que la presentación del personaje de Rey nos pareció más fluido y dinámico. Una vez conectas con Jyn Erso sólo quieres acompañarla y desearle un gran éxito en su cruzada contra el Imperio.

Junto a ella comparte protagonismo con Diego Luna, dando vida a Cassian Andor  y nos encantó ver a Riz Ahmed, quien después de su interpretación en The Night Of sigue ganando enteros como actor solvente. Un maravilloso Donnie Yen, encarnando la sorpresa de la película, el personaje de Chirrut  que se convirtió en nuestro favorito apenas dos minutos después de verlo en acción. Completan el elenco nombres tan relevantes como el gran Mads Mikkelsen, Ben Mendelsohn  o Forest Whitaker, correctos todos ellos aunque un poco desaprovechado su talento (en nuestra opinión).


La banda sonora, que siempre es muy relevante en todas las entregas de la saga, cayó en manos de Michael Giacchino. Quién lo tenía difícil, muy difícil con este encargo. Porque ser la primera entrega sin estar John Williams detrás de ella ya es complicado, pero si encima te dan el regalo con apenas tres meses de margen para componerla entera porque Alexander Desplat abandona el proyecto es lanzarse a una piscina con los ojos cerrados y sin saber si hay agua o no. Con todo esto, salva los muebles bastante bien, aunque no sea ni de lejos de sus mejores composiciones, encaja bastante bien con las escenas que aparecen en pantalla.

En resumen, una película más que correcta con un final realmente bueno que hará las delicias de los fans que crecimos con esta saga y contentará a los más escépticos.



A partir de aquí si no la habéis visto no sigáis leyendo porque queremos comentar algunas de las cosas que vimos y vamos con spoilers. Avisados estáis.

// INICIO SPOILERS//

La película no abusa de las escenas de humor, en su gran totalidad a manos del nuevo androide, K-2SO, tal vez sobreexplotado en ese papel. Con C3-PO tenías ese cúmulo de situaciones cómicas pero no resultan tan forzadas como las de K-2SO.


Una lástima los finales un tanto precipitado de 2 actores a los que les podían haber exprimido un poco más su gran talento con Whitaker y sobretodo con Mikkelsen. Un actor que se está convirtiendo en secundario de lujo de superproducciones (como en Dr.Strange).

La gran sorpresa nos la llevamos con la resurrección del Almirante Tarkin (al que dio vida el fallecido Peter Cushing) con quien la compañía ILM tuvo que esforzarse al límite para poder dejarlo creíble. En palabras del propio director Gareth Edwards “Fue mucha sangre, sudor y lágrimas de [estudio de efectos especiales y animación] Industrial Light and Magic. Ya en 2015 el Daily mail informaba: “Esta es una de las creaciones de CGI más complejas y costosas de todos los tiempos. Cushing es una línea de trama fundamental, ya que fue él quien creó a Darth Vader y hay una historia de fondo que saldrá”.

Con este reto frente a él Edwards contrato al artista de efectos especiales John Knoll para empujar la producción y encontrar una mejor manera de tener Tarkin en la película sin realmente reformular el papel. Estaba seguro de que el equipo podría usar CGI.

John siempre dijo ‘podemos hacer esto, podemos hacerlo, podemos hacerlo “Estaba muy seguro, y nosotros … sabes, para ser honesto, mucha gente estaba nerviosa todo el tiempo, como ‘¿va a pasar esto?’ Y luego lo hicimos”.

En el set de rodaje Tarkin fue interpretado por  Guy Henry (Pius Thicknesse en las dos últimas películas de Harry Potter) usado como “base” para el personaje. En post-producción, su actuación se utilizó para construir la figura de Cushing encima de su rostro.

Aunque al final de también aparece una joven princesa Leia, ésta última no aguanta tan bien el primer plano en el que aparece y realmente se ve más irreal su efecto.


Nos encantó ver de nuevo todas las naves que aparecen en la trilogía clásica, esos AT-AT dándolo todo en los combates, ver la estrella de la muerte completa, con un Vader desatado en la escena final, haciendo nuestras delicias.

Un recuerdo muy especial para el desaparecido Constantino Romero, Pedro Tena realiza una buena labor dándole voz a Darth Vader pero es inevitable no recordar al maestro y sentir cierta pena.

Además el final de la película, con todos los protagonistas que nos han presentado pereciendo uno tras otro como debía ser…. Dándole ese toque trágico de los héroes que se sacrifican por el resto de la galaxia. Menos mal que se han atrevido a ese sacrificio final y no a uno más feliz para contentar a la factoría del ratón más famoso del cine.

2 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo con vosotros. La película tarda en arrancar pero creo que era necesario ese arranque para presentarnos a los personajes y no es hasta que se encuentran en Jedha cuando la cinta empieza a acelerar hasta ese final que nos deja con un grato sabor en los labios. Me encanta el tono oscuro que le dan y también me gusta como muestran a la alianza rebelde capaces de emplear métodos cuestionables.
    Lo que si me parece sorprendente es que la gente tenga miedo de la influencia de Disney en el devenir de la saga. Miramax era de Disney y nos dio obras como "Pulp Fiction", "Kill Bill", "Abierto hasta el amanecer" o "El Cuervo".
    Un artículo muy bueno, por cierto.

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  2. Buenas Miguel, en parte es normal el miedo ya que últimamente cuando hay una gran compañía detrás suele cortarle las alas a los directores y creativos. Antes pasaba mucho menos y el mejor ejemplo es Warner...

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