Como buenos seguidores de la serie Fringe, al ver que había una sala de Escape llamada Walter Gate en la que nos proponían entrar en el laboratorio de un científico Walter Pittman y que toda la simbología nos recordaba a la serie no dudamos demasiado en reservar un hueco en esta sala. La historia nos explica que Walter ha llegado demasiado lejos en uno de sus experimentos y ha desaparecido. Antes de entrar a la sala, nos explican toda la historia de Walter, con la música de Michael Giaccino, la maravillosa intro de la serie de Fringe de fondo. A continuación, un vídeo nos da las últimas pistas para saber cuales son nuestros objetivos y ya con las ideas de la misión a realizar interiorizadas, entramos en la sala.
Lo primero que hay que comentar que es un buen escape room, si bien es cierto que no nos encontramos ningún enigma innovador, todos los acertijos están bien pensados y no hay problemas para poder encadenar las pruebas unas tras otras para avanzar. No es una sala de escape fácil, os recomendamos haber realizado antes otra un tanto más lineal o sencilla, para que sepáis de qué va un escape room. Si vais a esta primero, necesitareis bastantes pistas para poder salir.
Lo único que echamos en falta es la ambientación de la prueba, está bien pero no destaca, sería similar a la del juego enigma.
Eso sí, que nada de esto os eche para atrás , estamos ante un buen juego de escape que os exigirá prácticamente el tiempo completo para poder salir. Vais a tener que ser muy observadores y exprimir vuestras neuronas. Además el trabajo en equipo es más necesario que en otras salas, ya que no se trata de un escape lineal, el equipo se puede dividir, es más, en ciertos momentos se debe dividir para poder ganar tiempo de cara al sprint final.
Podéis consultar su posición en nuestro ranking aquí.
Nuestra valoración: 7,5 / 10
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